¿Que Lagendi soy?

En 2026 aparecen cuatro fuerzas que representan cuatro maneras de habitarse: Intuitiva, Serena, Silvestre y Artesana.
Cada una tiene su propio ritmo, su manera de procesar lo que siente, su mirada del mundo y su forma de florecer.
Conocé el universo completo de cada una: colores, semántica, lenguaje, simbolos, referencias, actrices, texturas y esencia.
Para que puedas verlas… sentirlas… y descubrir con cuál se alinean tu deseo y tu forma de habitar el 2026
Qué Lagendi soy?
Cada una vibra distinto, observa distinto, siente distinto… y no todas son para todo el mundo.
Es simple: cada tapa tiene personalidad propia (pero en su interior todas tienen las mismas herramientas)
No lo pienses tanto. Elegir tu Lagendi es descubrir cómo te habitás hoy.
¿Vamos a jugar un segundo con eso?
Hacé el quiz y descubrí cuál sos vos.


La Intuitiva es el alma del viento. Es la que conecta las flores, la que anuncia los cambios de estación, la que trae el polen que hace florecer nuevas ideas.
Representa la escucha profunda: lo invisible que se mueve adentro cuando afuera todo parece igual.
El colibrí es su guardián y su espejo: una fuerza liviana, libre y constante que recuerda que florecer no siempre se ve, pero se siente.
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Dentro del invernadero, representa la vida espontánea: como flores que crecen donde nadie las plantó y se vuelven parte del paisaje.
Es esa energía vital que mantiene vivo el jardín, la respiración que lo atraviesa todo y el recordatorio de que la belleza no necesita intención.
Su lugar es el de la libertad amable: la flor que baila con el viento, que atrae mariposas y que no exige espacio y deja su huella donde florece.
Ella le recuerda a las demás que florecer no requiere permiso, y que la vida, cuando se deja ser, se ordena sola.
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La Serena es esa mujer que aprendió a volver a su centro sin pelear con el proceso. Tiene espíritu de hermana mayor, tiene esa manera suave de sostener, de escuchar, de bajar el ritmo cuando hace falta.
Observa antes de hablar.
Siente antes de reaccionar.
Habita el tiempo con un tipo de madurez que no pesa: acompaña.
Cambia, muta, se desordena, a veces se pierde… pero sabe volver a su centro, a su jardín interior, donde la calma vuelve a tomar forma.
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Hay mujeres que florecen con las manos.
“La Artesana” nació de esa energía: la de quien repara, pinta, mezcla, desarma y vuelve a armar el mundo a su manera. Inspirada en los azulejos portugueses pero teñida del alma argentina, esta tapa crea mil mundos infinitos.
¿Querés saber más?

